Cómo estructurar un TFG paso a paso

El TFG es un trabajo autónomo que cada estudiante realizará bajo la orientación de un tutor/a, quien actuará como dinamizador y facilitador del proceso de aprendizaje. Debe ser un trabajo original no presentado con anterioridad para superar otras materias en esa titulación o en otras titulaciones cursadas en la actual Universidad u otras… Esa es básicamente la definición académica que se le da al trabajo de fin de grado, pero para ser más prácticos podemos decir que el TFG es un trámite instaurado en las Universidades, muchas veces cuestionado pero hasta la fecha imprescindible para la consecución del título.

Es decir, se presenta como un problema o una oportunidad, dependiendo de la perspectiva con la que lo abordemos. Según la profesora de la Universidad de Zaragoza, Carmen Agustín, existen una serie de pautas que podrían servirnos como claves o consejos para la realización de un buen TFG, estas son:

Nosotros estamos totalmente de acuerdo con la profesora, sin embargo creemos que se olvida de una cuestión fundamental; el proceso de escritura. La redacción de un texto académico no deja de ser un ensayo literario y si hay algo que los autores de este género comparten con los novelistas, guionistas o cualquier otro tipo de escritores, es el método. Cada uno tendrá sus horarios, sus preferencias, sus manías… pero todos tienen un sistema de trabajo que les permite ser eficientes y productivos.

Uno de los grandes problemas que muchos estudiantes se encuentran a la hora de desarrollar su TFG es precisamente la ausencia de este tipo de estructuras, nos referimos a trabajar sin horarios ni objetivos establecidos, esperar a los momentos de inspiración, realizar correcciones diarias, etc. todo eso son errores típicos en escritores noveles y evidentemente nadie puede exigirte ser profesional, pero ser capaz de establecer tu propio método de trabajo es crucial a la hora de afrontar con éxito un trabajo de fin de grado. Aunque siempre puedes encargar TFG a un especialista y olvidarte de todo el proceso además de asegurarte una nota brillante.

La estructura del TFG o TFM está muy establecida, aunque pueden existir pequeñas variaciones dependiendo de cada universidad, nos vamos a fijar en la fórmula tradicional. Profundizaremos en sus diferentes elementos, lo que nos servirá para entender su cometido y características. Cada uno de ellos tiene su propia relevancia y merece especial atención, entender su funcionamiento es esencial para abordarlos con solvencia.

Es la tabla de contenidos donde se consignarán todas las partes de un TFG, en su debido orden y con referencias a las páginas correspondientes.

Deberá responder a una serie de cuestiones como el porqué de la investigación, los objetivos establecidos e hipótesis previas, las técnicas y métodos empleados, resultados y respuestas a la hipótesis, y por último importancia y posible aplicación de los resultados obtenidos.

Como ves, aunque ocupa el segundo lugar en la estructura de un TFG, se trata de la última parte que redactaremos ya que necesitamos la perspectiva del trabajo desarrollado para su ejecución. Se trata de una especie de relato sobre el trabajo presentado, ya que cuenta con su inicio, desarrollo y desenlace, afrontarlo de este modo podría servir de ayuda. Se redacta en segunda persona del plural y en pasado.

Como su nombre indica, introduce o presenta el tema en cuestión y la hipótesis, además de aportar un contexto y una justificación de un TFG. Como el inicio de cualquier historia debe ser lo suficientemente relevante como para atraer la atención del lector, al igual que deberá hacer un planteamiento efectivo de todos los elementos protagonistas.

Se establecen pero no se resuelven, son presentados de un modo conciso e inequívoco. Se pueden dividir en: 

Es una respuesta sustentada en el trabajo de investigación que deberá ser aceptada o rechazada y para ello contará con el respaldo del estudio, los datos y/o las estadísticas. Será verificable, concisa y relevante.

Cada tipo de método de investigación se sirve de diferentes herramientas y estrategias para obtener la información necesaria. Conocerlas a fondo es imprescindible para poder seleccionar la que mejor se adapte a nuestro trabajo. Según el tipo de datos que trate podrá ser: 

Y según el enfoque de la investigación:

Los resultados muestran la información obtenida durante el proceso de investigación, examinan sus variables y las asociaciones entre ellas. Ofrece una respuesta coherente a la pregunta inicial y se basa en los datos que serán expuestos con orden y rigurosidad. Las conclusiones de un trabajo explican nuestro cometido en la investigación y plantean los posibles pasos a seguir en la continuación de la misma.

Ya hemos mencionado que deben seguir las normas de estilo establecidas. Es una parte de la estructura del TFG a cuidar ya que debemos referenciar todo el material empleado. Conviene tener esto en cuenta desde el inicio para no llegar al final del trabajo sin recordar algunas de las fuentes empleadas.

La estructura de un TFG es fundamental para conseguir un trabajo para nota, ya que es la base sobre la cual se construirá todo el trabajo. Conocer las diferentes partes del TFG y cómo deben ser estructuradas, te permitirá avanzar en tu investigación de manera ordenada y eficiente.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que la estructura de un TFG perfecta no es fácil de lograr, y saber cómo estructurar un TFG para conseguir la mejor nota requiere un gran esfuerzo y dedicación. Por eso, si en algún momento te sientes estancado o necesitas ayuda, recuerda que siempre puedes contar con la ayuda de los profesionales de Experto Universitario para terminar tu TFG antes de la fecha prevista y con grandes resultados.

¿Quieres conseguir buena nota en tu TFG? ¡Ponte en contacto con nosotros! Estaremos encantados de ayudarte.