¿Qué tipos de TFG existen en la actualidad?

Es el último año de carrera, todo aprobado, el fin de la etapa universitaria está cerca, pero aún falta un paso más, el más importante: hacer TFG. Este proyecto requiere de una excelente redacción, un número de páginas mínimo, una investigación empírica, análisis de datos, cero plagio y una calidad impecable.

Cada centro universitario tiene unas reglas específicas que hay que seguir, además las diferentes carreras ofrecen el poder elegir un tipo u otro de TFG. Elegir cuál es por el que se va a optar no es tarea fácil, al contrario de lo que pueda parecer no elegir el correcto puede acarrear un gran problema.

Vamos a ver a lo largo de este artículo ejemplos de TFG en cuanto a su tipología para ayudarte a decidir cuál crees que encaja mejor contigo y con tus estudios. Para muchas personas el TFG solo llega una vez en la vida, por lo que hay que dedicarle el tiempo que sea necesario.

Las siglas «TFG» pertenecen a «Trabajo de Fin de Grado». Se trata de una investigación, también conocida como proyecto, que no es opcional, sino que el alumno contrae una obligación de hacerlo al final de la carrera si quiere conseguir su título.

Cada centro universitario tiene su propio objetivo, su manera de puntuar, su modalidad o de analizar datos. Incluso sus requisitos suelen variar. Por eso, es primordial que el estudiante tenga una comunicación constante con su tutor para poder llegar incluso a analizar un TFG de revisión o una revisión bibliográfica si fuera necesario.

El TFG es una fantástica oportunidad para que los estudiantes muestren, de alguna manera, su dominio y comprensión de los conocimientos adquiridos mientras realizaba los estudios de su carrera universitaria. Es un requisito básico para obtener el deseado título universitario.

En función de la rama en las que el universitario esté matriculado este podrá decidir entre uno o varios tipos de TFG, con el mismo objetivo conseguir el ansiado título académico. Hay algún área más complicada que otra, pero en líneas generales podemos hablar de estos tipos de proyectos.

El TFG de investigación empírica es uno de los más famosos y utilizados. Los criterios son muy científicos, por lo que es utilizado en numerosas carreras de ciencias. Se aborda un tema específico, no debe existir el plagio y se busca que los trabajos muestren datos concretos y conclusiones novedosas sobre el tema elegido. Implica contar con mucho material previo para poder analizarlo.

El estudiante que está indeciso puede optar por este tipo de TFG que se centra en revisar y analizar críticamente la bibliografía que ya hay sobre un tema específico dentro de su área de estudios. El alumno de esta manera podrá desarrollar su capacidad de síntesis en cualquier tipología y área de estudio gracias al TFG de revisión e investigación bibliográfica.

Dentro de los tipos de TFG el de estudio de casos es uno de los más entretenidos para el alumno por distintos aspectos.

Ofrece la oportunidad de aplicar conceptos teóricos a situaciones o problemas reales, una parte importante para desarrollar habilidades de análisis y solución de conflictos. Con este objetivo el autor se dedica a analizar en profundidad uno o varios casos específicos relacionados con su área de estudio.

Este tipo de TFG no se puede solicitar en muchas carreras, pero algunas universidades sí que dan la oportunidad de realizarlo. Lo mismo sucede con los grados, no todos lo contemplan. Biología, Ciencias Ambientales o Bioquímica sí que lo suelen aplicar. En este caso el estudiante hace prácticas en empresas donde debe indentificar las dificultades para promover una solución coherente.

Sí, cada tipo de TFG puede exigir unos aspectos formales distintos a los otros. Depende en gran medida de la institución académica que debe ser la que marque las directrices a seguir. Por ello es clave hablar con el tutor antes, ya que él es la persona designada por la universidad para acompañar al alumno en todo el proceso.

Junto con él se diseñarán tanto el esquema a seguir como los primeros pasos. Una vez elegido el tipo de TFG que se va a hacer se seguirá la plantilla o esquema indicado por el tutor. No obstante, cabe remarcar que todos ellos deben tener una redacción exquisita, ser únicos y además no tener fallos ortográficos.

Como has podido ver a lo largo de este artículo, donde veíamos en detalles distintos tipos de TFG, no se puede seguir un modelo general y estático para realizar este trabajo de investigación.

En tus estudios debes ser consciente de que se trata de un trabajo de creación, con cero tolerancia al plagio ni a una modalidad igualitaria y universal.

Por eso, si piensas que te va a ser muy complicado, por falta de tiempo o de otras circunstancias, de llegar al nivel de calidad exigido, pide ayuda.

Una plataforma que ofrece ayuda a estudiantes en este aspecto es Experto Universitario, tiene muchas opciones, puedes mandarles un email para pedir información sobre el servicio, verás como recibirás toda la información sobre objetivos, análisis y tipos de planes individualizados en poco tiempo. En Experto Universitario están los mejores profesionales con las mejores referencias.

No en vano, vas a poder organizarte con el autor para definir el tiempo, las conclusiones, el método y forma en que vas a recibir tu TFG.