Copiar o no copiar, he ahí la cuestión… ¿Y qué podríamos decir nosotros que no se haya dicho ya al respecto? Lo cierto es que todo aquel que haya estudiado se ha planteado alguna (o varias veces) copiar, de hecho seguro que tú mismo/a ya lo has hecho o lo has intentado hacer en alguna ocasión. ¿Recuerdas la tensión del momento? Es normal pasarlo mal pero si estás seguro de lo que haces la cosa cambia. Vamos a compartir contigo distintos puntos de vista y técnicas sobre cómo copiar en un exámen con cámara y micrófono o presencial.
Los pros y los contras de copiar en un exámen
Los pros están bien claros; si copias y lo haces bien, conseguirás por lo menos aprobar sin estudiar. Los contras son varios; para empezar, copiar puede suponer un alto nivel de estrés dependiendo de la persona, ya que la amenaza de ser “descubiertos” nos acompañará hasta el final del exámen. Si finalmente somos descubiertos, habremos cometido una falta muy grave con sanciones que pueden llegar desde dos meses de expulsión hasta 3 años.
La conclusión es bastante obvia; si finalmente te decides por copiar, asegúrate de hacerlo con las mayores garantías posibles, no dejes margen para la improvisación y ten previsto un plan de emergencia. Si no lo tienes claro, nuestro mejor consejo para ti es que abandones la idea, solo deberías plantearte copiar si te sientes considerablemente seguro/a de lo que vas a hacer. Como casi todo en la vida, se trata de poner en una balanza los posibles y determinar qué “pesa” más.
Copiar en un examen: una cuestión de actitud
Antes de redactar este post tuvimos una conversación sobre el tema entre varios compañeros de Experto Universitario y si en algo estuvimos todos al 100% de acuerdo fue en que copiar es una cuestión de actitud. Intercambiamos experiencias y anécdotas vividas durante muchos años de formación universitaria y llegamos a la conclusión de que casi cualquier tipo de método para copiar es bueno si se hace con la actitud correcta. Hemos visto a compañeros copiar con tanto descaro que pasaron desapercibidos aunque pareciera ser obvio, también hemos visto a otros con técnicas súper elaboradas que por los nervios o la inseguridad se han acabado delatando a sí mismos.
En realidad todo tiene que ver con el lenguaje corporal, durante un exámen los profesores están atentos a todo lo que sucede y aunque puedas pensar que no estás haciendo ningún ruido o que apenas te mueves tus gestos están ofreciendo una gran cantidad de información, de modo que cuanto más natural te comportes más desapercibido/a pasarás. También comentamos que en muchas ocasiones durante el proceso de preparación de la “chuleta” muchos acaban memorizando la información y cuando llega el día del exámen ni siquiera la necesitan. Así que nuestra conclusión final fue que hay gente más predispuesta a lidiar con estas situaciones y ejecutarlas con naturalidad y otros que deberían buscar alternativas que no les hagan sentirse expuestos.
Métodos para copiar en un exámen presencial
Verás, la gente lleva copiando en exámenes presenciales probablemente desde hace siglos, así que como te podrás imaginar ya está todo más que inventado… ¿o tal vez no? La tecnología nos ofrece nuevas posibilidades para desarrollar ciertas técnicas que nos pueden servir de gran ayuda si finalmente optamos por hacernos una “chuleta”, “machete”, “torpedo”, “maseo”, “acordeón”, “plaje”, o como quiera que le digan en tu país.
Podríamos hacer un compendio de las clásicas e infalibles, como los bolígrafos rayados, las notas bajo las piernas o en cualquier otro sitio, pero seguro que ya las conoces así que hemos decidido ofrecerte una técnica de la que quizá no hayas oído hablar. Se trata de un método infalible cuando está bien ejecutado y te lo traemos por cortesía de un miembro de nuestro equipo de autores, si la pones en práctica y te funciona puedes contactarnos para agradecérselo ;) Vamos con ella, paso a paso:
La Botella Mágica
Se trata de una chuleta que requiere conocimientos de diseño gráfico básicos. Para llevarla a cabo necesitarás una botella de agua, tu ordenador y una impresora con scanner.
- Despega la etiqueta de la botella cuidadosamente para no dañarla.
- Escanea la etiqueta completa.
- Abre Photoshop u otro programa similar y borra la parte de la etiqueta donde aparecen los componentes del agua, su origen, etc. Utiliza la herramienta para copiar la textura del fondo de la etiqueta y rellena lo que acabas de borrar, de modo que quede uniforme.
- Añade sobre ese fondo el texto que necesites para tu exámen con un tipo de fuente similar al del resto de la botella, asegúrate de que el tamaño sea pequeño pero legible desde una distancia considerable.
- Imprime la imagen de la etiqueta editada.
- Pega la etiqueta con el texto en tu botella, usa pegamento en barra y hazlo con cuidado.
- Asegúrate que el agua de la botella no esté fría para que no te arruine la etiqueta y transpórtala con cuidado hasta el aula.
¡Y ya lo tendrías! Ahora queda la segunda parte y no por ello la menos importante; saber usarla durante el exámen. El primer escollo será conseguir que te dejen tener la botella encima de la mesa, por lo general no suelen poner pegas y en el peor de los casos puedes tenerla a tus pies y usarla cuando hagas como que bebes. La habilidad que tengas para leer el texto con rapidez y discreción, así como la capacidad de condensar la información en un fragmento de texto reducido serán determinantes.
Suerte.
Métodos para copiar en un exámen online con cámara
Los exámenes online, hasta hace no mucho tiempo, algo totalmente inusual en la vida de los estudiantes, se han convertido en un método de evaluación común y frecuente. Suponen un modo completamente distinto de examinarse, ya que todo es diferente. ¿Y cómo puedo copiar en un exámen online con cámara y micrófono? Bien, hay técnicas de los exámenes presenciales que se podrían usar en las evaluaciones online, también hay otras que podemos emplear, pero debemos tener en cuenta que los profesores también cuentan con herramientas de detección adaptadas.
Algunos consejos a la hora de copiar en un exámen online
Crea una estrategia.
Intenta visualizar todos los escenarios posibles y busca una solución para cada uno de ellos.
Ensaya tantas veces como sea necesario y hasta que tengas todo automatizado.
No te presentes al exámen con la sensación de que estás delinquiendo, mentalízate y acude con seguridad en ti mismo/a.
Si no eres capaz de controlar la tensión o los nervios, aborta.
Jefe de equipo de autores
Como experto académico, dirige el blog de Experto Universitario y es responsable de todas sus publicaciones. Asimismo es autor especialista de Experto Universitario y se encarga de gestionar la comunicación entre plataforma, clientes y redactores.